dimecres, 23 d’abril del 2014

Insultos



La generalizada degeneración de nuestros hábitos culturales ha llegado, ya, a extremos tales que se han empezado a ver resentidos aspectos que nunca hubiéramos pensado se verían envueltos en tales circunstancias adversas, especialmente aquellos que engloban las más rancias y básicas tradiciones humanas.

Queridos, para que les va a hablar uno, si otros ya lo han hecho antes, aunque no necesariamente mejor:
  • «El ‘arte’ de insultar es un método brutal y corrosivo pero, para que sea eficaz, “debe ser ingenioso y elegante"», «"Desapareció la intención catártica de admirar y divertir con el ingenio, para convertirse en una costumbre grosera, en una especie de automatismo verbal, en unas muletillas empobrecedoras"», Néstor Luján
  • «Es una especie de verónica verbal: además de elegante, debe ser certero y oportuno. Y, para que clasifique como ‘arte’, debe responderse de inmediato, en pocos segundos; de lo contrario, es rencor», Héctor Anaya
  • «En todos los lugares y épocas ha habido siempre mucha insatisfacción con los gobiernos, las leyes y las instituciones públicas; por lo general ello se ha debido, empero, a que se tiende a achacar a éstos la culpa de la miseria que acompaña indefectiblemente a la existencia humana. (…) Sin embargo, nunca antes había sido representada esta farsa de manera tan mendaz y atrevida como ahora lo es por los demagogos de la actualidad», Arthur Schopenhauer
  • «Hacen falta cinco cumplidos para resarcir un insulto», Eduard Punset
  • «Insultar también es una forma de relacionarte con la gente», Pascual Miguel
Por nuestra parte no podemos hacer otra cosa mejor que recomendar a alguien grande, anglosajón, pero quizás el que menos de entre todos ellos:

A Grand Taxonomy of Shakespearean Insults





Publicado el 23/4/2014 en la Llista_IP como La(s) infografía(s) de los martes, o no: [222]