diumenge, 14 d’abril del 2019

De què serveix una flota de busos accessibles si les parades no ho son? entrevista al Diari de Tarragona

El estudio de accesibilidad analizó el estado de 51 paradas de la EMT y detectó 1.437 déficits. Resolverlos costaría 367.002 euros.

Por Norián Muñóz
 
La pregunta se la hace Jordi Planas, experto en accesibilidad que ha colaborado en el trabajo de campo para analizar 51 paradas en el marco del Pla Municipal d’Actuació per a la Millora de l’Accesibilitat a Tarragona, PAMAT

En resumen, explica, en las 51 paradas se encontraron 1.437 déficits: 311 en marquesinas, 337 en ‘palos’, 213 en señaliza-ción, 222 en comunicación y 352 en información.

En el recorrido se ubicaron paradas como la de la foto (aunque esta no está entre las analizadas) que son, a todas luces, inaccesi- bles por el ancho de la acera. O como la parada ubicada en plena carretera N-240 junto al arcén.

Sin espacio para sillas 

No obstante, aclara Planas, la mayoría de las paradas eran ‘practicables’ en silla de ruedas, es decir, se podía llegar hasta ellas. El problema llegaba, por ejemplo, con el modelo de marquesinas más común. El mismo, por norma, debería contar con un espacio para que una persona en silla de ruedas pueda protegerse de la lluvia. Pero esto no sucede porque el espacio está ocupado por bancos. En otros casos la marquesina está bien pero la instalación es errónea.

Hay, además, problemas con la colocación de los carteles con los horarios que, en la mayoría de los casos, están ubicados demasiado altos. Los números también suelen ser demasiado pequeños y su lectura es difícil para muchos usuarios.

La rotulación con los números de las líneas también se debería revisar, ya que algunos son números blancos sobre colores pasteles lo que, por ejemplo, dificulta la lectura para las personas con daltonismo.

El coste estimado de arreglar las deficiencias en las paradas estudiadas está en los 367.002 euros, pero con una buena gestión, apunta Planas, el coste podría ser menor.

Planas señala que con esta trabajo «hemos demostrado que hay una bolsa de inaccesibilidad importante. Ahora de lo que se trataría es de que no creemos mas espacios y servicios inaccesibles, porque sino esto no acabará nunca», sentencia.