dissabte, 12 de març del 2022

A un niño en el día de su bautizo

Ha nacido otro angelito

que en la casa ya alboroza

junto a sus hermanitos,

con sus risas y sus gritos

y su carita de rosa.


Tus papás con faz dichosa

te contemplan extasiados,

y con mirada amorosa

ven tu figura graciosa 

que les tiene embelesados.


Juntos a los pies de tu cuna,

en ti, fraguan sus anhelos,

y sobre un rayo de luna

de plateada hermosura

te dedican sus desvelos,

 

y ya piensan cavilosos

qué serás cuando mayor:

si irás por cielos nubosos,

o por mares procelosos,

quizás poeta o pintor...


si serás representante,

médico o economista,

boticario o almirante,

en negocios importante

o cuidadoso alquimista,
físico o aventurero,

filósofo o astronauta...

más deseando primero

que siempre por tu sendero,

la bondad te dé la pauta.


Los abuelos amorosos

ya solo viven por ti,

y tú los haces dichosos

al ver los rasgos hermosos

de tu rostro tan gentil.


Desde el principio supiste

de lágrimas y de dolor...

pero de todo venciste

pues a tu lado tuviste

de tus padres el calor.


Decirte hoy cosas bellas

quisiera con mi canción,

compararte a las estrellas

que envuelven con sus estelas

al lirio, pájaro o flor.


A mi sobrino estimado

¿qué le podré decir yo

si ya es tan agraciado?

solo una cosa mejor:

que has sido hoy bautizado

¡y ya, eres hijo de Dios!
 
 
 
 
 
Barcelona 21 de Febrero 1969


[Mecanoscrits: 1 genèric i 2 "a mi sobrino"]