Con su agradable formato y su amena lectura, se pasan unas horas agradables e instructivas que no se olvidan; salpicado acá y allá con preciosas ilustraciones y fragmentos de la mejor lírica española resulta de una gran amenidad su lectura.
Al lado de las más científicas normas para la preparación del terreno, abonos, composición de las tierras a emplear, injertos, semilleros, etc.etc... encontramos anécdotas y datos históricos que distraen y encantan; hay un capítulo dedicado a las dalias y sus datos de origen que es una verdadera delicia. Pero no es esto sólo, en el libro se encuentran normas para lograr hasta la más pura estilística en jardinería; y si en un principio, nos da reglas para el sencillo macizo de flores que puede decorar una rústica casa de labranza nos sumerge luego en la maravillosa fantasía de los jardines de estilo. Y así pasamos a la elegancia de los jardines ingleses, los españoles con su gran variedad y dibujo, los versallescos, jardines italianos, clásicos, modernos, etc.
Sumergidos en este mundo alucinante de formas y colores, percibimos todavía un detalle cálido y humano, y es el gran amor y cariño hacia las flores que a lo largo de todo el libro ha sabido plasmar en sus páginas el autor Don Antonio Allué Morer, admirado y querido Director de CERES, a quien felicito de corazón así como damos la enhorabuena a los poseedores de "JARDINES Y FLORES".
Mayo 1969
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